El Programa de Profesional Superior Universitario (PSU) se ha convertido en un puente transformador que acerca la educación superior a quienes más la necesitan. Este modelo inclusivo y flexible, orientado a la justicia social, ofrece una oportunidad única para las personas que enfrentan barreras económicas, sociales y culturales, brindándoles una alternativa de alta calidad para su profesionalización. Así, nuestra universidad reafirma su compromiso con la equidad y el desarrollo.
El pasado 8 de noviembre de 2024 representó un antes y un después con la graduación de las primeras dos generaciones del PSU. Este evento reunió a 132 egresadas y egresados provenientes de 30 municipios de Chiapas, 15 estados de México y Guatemala. Entre las y los graduados, destacaron estudiantes de áreas como Justicia Social, Infraestructura y Desarrollo Comunitario, y Bienestar Humano y Comunitario, quienes ahora están preparadas y preparados para convertirse en agentes de cambio en sus comunidades.
El impacto del PSU trasciende lo académico: se posiciona como un instrumento para la transformación social en Chiapas. Las y los egresados no solo adquieren conocimientos técnicos y profesionales, sino también herramientas prácticas para fortalecer sus entornos locales, generar empleo y contribuir al desarrollo sustentable de las regiones más vulnerables. Este modelo de educación inclusiva no solo amplía oportunidades individuales, sino que también fortalece el tejido social de las comunidades, consolidando a nuestra institución como un motor de esperanza y cambio en contextos desafiantes.
Con siete programas académicos que abarcan áreas como: Acuicultura, Biotecnología y Desarrollo Socioeconómico, el PSU demuestra que la educación es un motor fundamental para el progreso social. Este modelo coordinado por la Secretaría para la Inclusión Social y diversidad cultural de la UNACH reafirma el compromiso institucional con la construcción de un Chiapas más equitativo y próspero, ofreciendo programas diseñados para adaptarse a las necesidades específicas de las y los participantes.
Los planes de estudio del PSU incorporan saberes locales y promueven competencias tecnológicas, éticas y sociales, abarcando áreas como Acuicultura, Infraestructura y Desarrollo Comunitario, Agropecuario y Forestal, Biotecnología y Alimentos, Justicia Social, Desarrollo Socioeconómico y Bienestar Humano y Comunitario. Esta flexibilidad permite a las y los estudiantes obtener certificaciones técnicas y profesionales que mejoran su empleabilidad y contribuyen directamente al fortalecimiento comunitario y la justicia social.
Con iniciativas como el PSU, nuestra universidad no solo amplía horizontes académicos, sino que también transforma vidas, dejando una huella imborrable en la construcción de una sociedad más justa y solidaria.
Texto: María del Carmen Nucamendi Estrada. Imágenes: SISYDIC UNACH