La Facultad de Ingeniería, Campus I, de la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH), vivió tres días de intensa actividad con la celebración de la Semana de Ingeniería 2025, un evento que sirvió como marco perfecto para conmemorar el 60 aniversario de una de las facultades pilares de nuestra universidad. Del 28 al 30 de abril, estudiantes, docentes y autoridades participaron en un programa integral que combinó lo académico, lo cultural y lo deportivo, destacando el talento y el espíritu innovador que caracterizan a la comunidad ingenieril de la UNACH.
Los concursos técnicos fueron el epicentro de la atención durante el evento, con el 3er Concurso de Diseño de Mezclas de Concreto, donde los participantes demostraron su destreza en la elaboración de mezclas óptimas, evidenciando su dominio técnico. Asimismo, el Concurso de Levantamiento de Muros puso a prueba las habilidades prácticas de construcción, mientras que el Concurso de Puentes de Madera desafió la creatividad y los conocimientos estructurales de los futuros ingenieros civiles, consolidando un espacio de aprendizaje activo y competitivo.
En el ámbito deportivo, los torneos de Fútbol Sala, Voleibol y Básquetbol mantuvieron un ambiente de entusiasmo, con equipos que compitieron con un gran espíritu deportivo, fomentando la camaradería y el trabajo en equipo entre los asistentes. Por otro lado, el Concurso de Ajedrez reunió a las mentes más estratégicas de la facultad, ofreciendo un contraste intelectual que enriqueció la diversidad de actividades.
La parte cultural brilló con el evento "Talento Ingeniería", donde los estudiantes sorprendieron con presentaciones de música, canto y baile, incluyendo vibrantes números de K-Pop y bailes folklóricos que resaltaron la riqueza cultural de la comunidad universitaria. El Cine Itinerante complementó esta experiencia, proporcionando momentos de esparcimiento y reflexión que fortalecieron el vínculo entre los participantes.
El programa académico destacó con la ponencia "Reseña Histórica de la FECIC", impartida por el Ing. Damián Robledo Gómez, quien compartió un valioso recorrido por la historia de la facultad, evocando su legado. Además, el Primer Simulacro Nacional 2025 reforzó la importancia de la prevención y la seguridad entre la comunidad universitaria, integrando un componente práctico de gran relevancia.
El evento culminó con una ceremonia de premiación que reconoció a los ganadores de las diversas competencias, cerrando con éxito esta iniciativa. La Semana de Ingeniería 2025 no solo cumplió su objetivo de fomentar la excelencia académica y la integración estudiantil, sino que también dejó un claro mensaje de orgullo por pertenecer a la UNACH, reafirmando su compromiso con la formación integral de sus estudiantes.
Texto: Claudia I. González Farrera
Imagen: UNACH
El reciente anuncio del gobernador Eduardo Ramírez Aguilar para convertir a la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH) en "Benemérita Universidad Autónoma de Chiapas" representa un hito institucional que trasciende lo simbólico. Esta propuesta, realizada durante la inauguración del edificio "J" de la Facultad de Humanidades, reconoce 50 años de contribución ininterrumpida (desde su fundación en 1975) de la UNACH al desarrollo educativo, científico y cultural del estado.
El título de "Benemérita", máximo reconocimiento que puede obtener una universidad pública en México, se otorga a instituciones con trayectoria excepcional en servicio público. Como señaló el mandatario, esta distinción sería coherente con la reciente reforma constitucional que incorporó a la UNACH como parte fundamental de la estructura del poder público en Chiapas, reconociéndose formalmente como el tercer pilar del estado junto a los poderes Ejecutivo y Legislativo.
La propuesta se sustenta en cuatro ejes fundamentales: el impacto formativo con más de 120,000 egresados que contribuyen al desarrollo estatal, la producción científica con 162 cuerpos académicos registrados en el Sistema Nacional de Investigadores, la labor cultural con 38 festivales anuales y una producción editorial de 56 publicaciones anuales, y su amplia cobertura educativa con 142 programas educativos vigentes (93 licenciaturas y 49 posgrados).
La iniciativa se alinea con casos emblemáticos como la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Para la UNACH, representaría un reconocimiento a su madurez institucional, validando su modelo educativo con enfoque social, consolidando sus programas de vinculación comunitaria y respaldando su aporte en la solución de problemas regionales.
El rector Dr. Oswaldo Chacón Rojas ha enfatizado que este nombramiento preservaría plenamente la autonomía universitaria, mientras enriquecería el patrimonio institucional, proyectando a nivel nacional su compromiso con la educación pública transformadora.
Como siguiente paso, la iniciativa será analizada por el Congreso del Estado, donde se evaluará el impacto histórico de la UNACH como principal formadora de profesionales del estado, generadora del 42% de la investigación científica chiapaneca e institución con presencia en 12 de las 15 regiones económicas del estado.
De aprobarse, la UNACH se convertiría en la cuarta universidad estatal con esta distinción en México, sumándose a la BUAP, UAA y Benemérita Escuela Normal Veracruzana.
Actualmente, la UNACH cuenta con 142 programas educativos (93 licenciaturas y 49 posgrados), 9 campus universitarios estratégicamente ubicados, 32,500 estudiantes en formación y 83 proyectos de investigación con impacto social certificado.
Este potencial reconocimiento consolida a la UNACH como eje estratégico del desarrollo sostenible de Chiapas, reafirmando su visión de formar profesionales éticos y generar conocimiento transformador para los desafíos del siglo XXI.
Texto: Redacción Gaceta
Fuentes: Portal oficial UNACH 2024/Constitución Política de Chiapas/Archivo histórico
La Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH) inició oficialmente las celebraciones por su 50 aniversario el pasado 17 de abril de 2025, fecha que marca el inicio de sus actividades académicas en 1975 y el comienzo de un año de conmemoraciones por este hito histórico. Durante cinco décadas, la máxima casa de estudios de Chiapas ha mantenido un compromiso ininterrumpido con la formación profesional, la investigación científica, la difusión cultural y el desarrollo social en la entidad.
Este Jubileo de Oro representa la consolidación de la UNACH como pilar fundamental en la construcción del capital humano chiapaneco. A lo largo de su historia, la institución ha graduado a miles de profesionales que han contribuido significativamente al progreso económico, político y cultural del estado, a través de programas educativos de calidad y una oferta académica diversificada que responde a las necesidades regionales.
El rector Dr. Oswaldo Chacón Rojas destacó durante la ceremonia conmemorativa que "este aniversario no solo celebra nuestro pasado, sino que renueva nuestro compromiso con la excelencia académica y la transformación social". La universidad ha demostrado una notable capacidad de adaptación a los cambios sociales y tecnológicos, manteniendo siempre su misión de formar ciudadanos críticos y comprometidos con su entorno.
Con una presencia estratégica en diversas regiones del estado a través de sus ocho campus y extensiones universitarias, la UNACH ha democratizado el acceso a la educación superior, beneficiando especialmente a jóvenes de comunidades históricamente marginadas. Este modelo de expansión territorial ha permitido articular el conocimiento con las necesidades específicas de cada región.
Las celebraciones del 50 aniversario incluirán a lo largo de 2025 una serie de eventos académicos, culturales y deportivos que involucrarán a toda la comunidad universitaria y a la sociedad chiapaneca. Este programa conmemorativo busca:
Como parte central de las celebraciones, se desarrolló el Congreso Internacional "Educación y Desarrollo Regional", que reunió a especialistas de América Latina que analizó el rol de las universidades públicas en el siglo XXI. Paralelamente, se anunció la publicación de la obra histórica "UNACH: 50 años transformando Chiapas", que documentará el impacto institucional en el desarrollo estatal.
Al conmemorar este Jubileo de Oro, la UNACH reafirma su vocación de servicio y su liderazgo académico en el sureste mexicano. Los festejos constituyen una plataforma para renovar su compromiso con la calidad educativa, la investigación de vanguardia y la vinculación social, proyectándose hacia el futuro como agente de cambio para un Chiapas más próspero y equitativo.
Texto: Yadira Fontes García
Fotografía: Archivo Histórico UNACH
El Centro de Estudios para la Construcción de Ciudadanía y la Seguridad (CECOCISE) celebró el 22 de abril de 2025 su XVI aniversario de creación, reafirmando su compromiso con la formación de profesionales en Derechos Humanos y la construcción de una sociedad más justa. Este hito consolida al centro como un pilar fundamental en la misión educativa y social de la universidad.
Fundado el 22 de abril de 2009 mediante acuerdo institucional, el CECOCISE se ha consolidado como un referente académico en materia de derechos humanos, seguridad ciudadana y construcción de ciudadanía. Durante estos 16 años, ha desarrollado programas académicos, investigaciones y proyectos de vinculación que han impactado positivamente a la sociedad chiapaneca, destacando su labor en la formación de más de 1,200 profesionales en derechos humanos y seguridad, el desarrollo de 30 investigaciones aplicadas sobre violencia, discriminación y acceso a la justicia, la implementación de 15 proyectos comunitarios en zonas vulnerables de Chiapas, y la colaboración con 20 organizaciones nacionales e internacionales.
Guiado por el lema "Por la conciencia de la necesidad de servir", el centro ha logrado avances significativos en diversos ámbitos. Un pilar fundamental ha sido la capacitación a servidores públicos en perspectiva de derechos humanos, fortaleciendo sus competencias para garantizar el respeto y la protección de los derechos fundamentales en el ejercicio de sus funciones.
Otro aporte destacado es la asesoría a víctimas de violencia institucional, brindando acompañamiento y orientación a quienes han enfrentado abusos, lo que ha permitido visibilizar estas problemáticas y buscar soluciones que promuevan la justicia y la reparación del daño en las comunidades afectadas.
Además, el CECOCISE ha trabajado en la promoción de la cultura de la legalidad en jóvenes, a través de programas educativos que fomentan valores cívicos y el respeto por las normas, contribuyendo a la formación de una ciudadanía consciente y participativa, especialmente en sectores juveniles de Chiapas.
Las voces de los egresados reflejan el impacto del centro. La Mtra. Laura Méndez, de la primera generación, compartió: "El CECOCISE me dio las herramientas para trabajar en la defensa de mujeres indígenas víctimas de violencia. Hoy dirijo un albergue que atiende a 120 familias", un testimonio que inspira y evidencia el alcance transformador de la formación impartida.
Mirando hacia el futuro, el CECOCISE proyecta para el periodo 2025-2026 el lanzamiento de la Maestría en Derechos Humanos y Seguridad Ciudadana, la creación del Observatorio de Violencia Institucional y la expansión de sus programas a cinco municipios prioritarios, consolidando su compromiso con la justicia social y los derechos humanos en la región.
Esta celebración de 16 años reafirma el papel del CECOCISE-UNACH como un espacio de formación que trasciende las aulas, generando profesionales comprometidos con los valores de equidad, justicia y servicio, y posicionando a la UNACH como una institución líder en la promoción de una educación que transforma.
Texto: Claudia I. González Farrera
Imagen: UNACH
En el marco del Día Internacional de la Francofonía, la Universidad Autónoma de Chiapas, a través de la Sección de Francés del Departamento de Lenguas Tuxtla, celebró una jornada que trascendió las aulas para convertirse en un espacio vivo de encuentro con las culturas francófonas. La actividad, que año con año suma voluntades e intereses diversos, volvió a consolidarse como una plataforma educativa, artística y lingüística que fortalece la formación integral de la comunidad universitaria.
Estudiantes de la Licenciatura en Enseñanza del Inglés, junto con docentes y miembros del colectivo FRANCHIS UNACH, ofrecieron una muestra dinámica y profundamente creativa de la pluralidad francófona. La jornada incluyó expresiones artísticas, juegos pedagógicos, degustaciones culinarias y presentaciones musicales que acercaron al público a los valores de diversidad, cooperación y diálogo que caracterizan a la francofonía global.
En esta edición, se contó con la participación especial de estudiantes del Colegio Rufino Tamayo, quienes, con una interpretación musical que conjugó emoción y técnica, añadieron una nota festiva y de colaboración interinstitucional al programa.
Promover el aprendizaje del idioma francés, difundir la riqueza cultural de los países francófonos y fortalecer los vínculos académicos e interculturales son, desde hace varios años, los ejes que guían esta conmemoración, la cual forma parte de las acciones que la UNACH impulsa para proyectar una universidad de vocación internacional.
Durante la clausura, la coordinación del evento subrayó el carácter estratégico de estas actividades:
“Este espacio no es solo una celebración; es un compromiso con la formación global, con el respeto a la diversidad cultural y con el ejercicio vivo del multilingüismo en nuestras aulas”.
La celebración de la Francofonía UNACH 2024 es testimonio del impulso sostenido que la universidad otorga a las lenguas extranjeras como herramientas para la construcción de ciudadanía global, sensibilidad intercultural y diálogo académico.
Así, la UNACH continúa escribiendo su historia internacionalista desde lo local, abriendo puertas a nuevos saberes, acentos y posibilidades.
Texto: Yadira Fontes García
Fotografía: Departamento de Lenguas Tuxtla
La Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH) ha iniciado un proyecto histórico de restauración y conservación bibliográfica, luego de que el huracán “Víctor”, registrado en 2023, ocasionara severos daños al 35% del acervo de la Biblioteca Central “Carlos Maciel Espinosa”, uno de los patrimonios culturales y académicos más relevantes del sureste mexicano.
En respuesta a esta contingencia sin precedentes, la Universidad ha emprendido una estrategia técnica y académica sin igual, en colaboración con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), para garantizar la recuperación integral del acervo afectado, estimado en 24 mil 500 volúmenes. Esta alianza interinstitucional representa una acción de vanguardia en materia de conservación documental en la región, con estándares internacionales y tecnología de última generación.
Durante los 18 meses en que se suspendieron los servicios presenciales en la Biblioteca Central, la UNACH implementó un programa emergente de digitalización, a fin de mantener el acceso al conocimiento para la comunidad universitaria. Actualmente, con una inversión superior a los 3.8 millones de pesos, se ha dado inicio a la restauración de 2 mil volúmenes prioritarios, entre los que destacan obras fundacionales publicadas entre 1940 y 1960, así como el emblemático “Herbario Chiapaneco” de 1897, considerado pieza única y de alto valor histórico para la ciencia en México.
El rector de la UNACH, Dr. Oswaldo Chacón Rojas, subrayó la dimensión simbólica del proyecto:
“Estamos salvando la memoria académica de Chiapas. Cada libro restaurado es un triunfo contra el olvido y una garantía para las futuras generaciones.”
Por su parte, el Mtro. Ricardo Paquini Vega, especialista en conservación documental de la UNAM, señaló que esta colaboración marca un precedente técnico para la región:
“Establecemos nuevos estándares de conservación para el sureste, combinando tecnología de vanguardia con protocolos internacionales.”
La restauración comprende la instalación de un sistema especializado de climatización para el resguardo de fondos documentales, cámaras de desinfección por ozonización, así como técnicas de secado criogénico, diseñadas para preservar la integridad de materiales históricos que, por su antigüedad y fragilidad, requieren procesos minuciosos y altamente controlados.
Como resultado tangible de este proceso, se proyecta la reapertura del Área de Consulta General para marzo de 2025, mientras que el Fondo Histórico completará su rehabilitación para el año 2026, consolidando este esfuerzo como una victoria institucional de largo aliento, que protege no solo libros, sino también la herencia intelectual, científica y cultural de Chiapas.
Con este proyecto, la Universidad Autónoma de Chiapas reafirma su compromiso con la preservación de la memoria universitaria, la responsabilidad patrimonial y el acceso equitativo al conocimiento, respondiendo con dignidad y visión de futuro a los retos que impone el cambio climático en la infraestructura educativa del país.
“Por la conciencia de la necesidad de servir.”
Texto: Claudia I. Gonzalez Farrera
Compromiso, talento y rigor científico. Con estas tres cualidades como estandarte, un grupo de estudiantes de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, Campus II, puso en alto el nombre de la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH) en dos eventos de gran prestigio: el 4° Congreso Médico Veterinario de Pequeñas Especies (COMVET 2025) en Guadalajara y el Congreso Nacional de Medicina Veterinaria y Zootecnia.
Del 15 al 17 de marzo, en el reconocido centro Expo Guadalajara, se congregaron los más destacados expertos nacionales e internacionales del sector veterinario para debatir los temas más actuales en el tratamiento de animales de compañía. Allí, un equipo de estudiantes y docentes de la UNACH no solo participó: triunfó.
El primer lugar en COMVET 2025 fue para nuestras alumnas Danika Jokebeth Zavaleta Mundo, Alondra García Morales, Azul Montserrat Ochoa Araujo, Diana Belén Ruiz Cordero y Fernanda Verde León, quienes presentaron el proyecto titulado:
"Presencia de agentes patógenos en bebederos comunitarios para perros y gatos en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas".
Producto de su Proyecto de Investigación Integrador, esta investigación se desarrolló bajo la asesoría del Dr. Jorge Vázquez Bucheli y fue reconocida no solo por su solidez metodológica, sino por su impacto directo en la salud pública y el bienestar animal. Un ejemplo contundente de cómo la ciencia local puede generar soluciones globales.
A este logro se suma el triunfo de otro grupo de estudiantes en el Congreso Nacional de Medicina Veterinaria y Zootecnia, donde obtuvieron el primer lugar con un proyecto enfocado en bienestar animal y sostenibilidad pecuaria. Este reconocimiento no es casualidad, sino reflejo de la excelencia formativa que la UNACH promueve en todos sus programas.
“Este logro es un reflejo del trabajo conjunto entre estudiantes y docentes, y nos motiva a seguir fortaleciendo la calidad académica en nuestra Facultad”, expresó el Dr. Hernán Mandujano Camacho, Director de la FMVZ, Campus II.
Más allá del triunfo, estos eventos representaron una plataforma de crecimiento académico y profesional, donde nuestras y nuestros estudiantes tuvieron la oportunidad de establecer redes, aprender de especialistas de renombre y proyectar sus investigaciones al mundo. La UNACH, a través de su comunidad veterinaria, está marcando huella en los escenarios más exigentes del país.
Estos éxitos confirman el compromiso institucional con la formación de profesionistas íntegros, capaces de generar conocimiento útil y transformar positivamente su entorno. La UNACH no forma únicamente veterinarios: forma líderes con vocación científica, sentido social y ética profesional.
La comunidad universitaria celebra estos logros con orgullo y gratitud, reconociendo que detrás de cada premio hay horas de estudio, acompañamiento docente, trabajo en equipo y una convicción firme: servir a Chiapas y al mundo desde la ciencia y la educación.
Texto: Claudia I. González Farrera
Imágenes : UNACH
¿Estamos listos para construir juntos una universidad más pertinente e incluyente? La Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH) está en un proceso de transformación académica sin precedentes. Con el liderazgo del rector, Oswaldo Chacón Rojas, se está diseñando un nuevo modelo educativo que busca responder mejor a la realidad del estado, del país y del mundo. Para entender la magnitud de este cambio, conversamos con Catalina López Ordoñez, directora de Formación e Investigación Educativa, quien explicó la importancia de este nuevo modelo y el impacto que tendrá en la comunidad universitaria.
A veces damos por hecho que la educación superior debe seguir ciertos moldes preestablecidos, sin detenernos a cuestionar si esos modelos realmente responden a las necesidades de nuestros estudiantes y su contexto. La doctora López Ordoñez señala que el modelo educativo es la base teórica epistemológica que orienta la enseñanza en la universidad. En este caso, se fundamenta en una perspectiva humanista, una corriente que propone una educación que reconozca el conocimiento local y valore las realidades específicas del territorio. Es un cambio profundo: dejar de ver la educación como una copia de sistemas importados y comenzar a construir un modelo propio, alineado con nuestra identidad y necesidades.
Este nuevo modelo tiene varios objetivos esenciales. Uno de ellos es reconocer la importancia del territorio y formar estudiantes que puedan responder a las problemáticas locales con soluciones reales. Durante muchos años, la educación superior en Chiapas ha seguido esquemas ajenos a su realidad, dejando de lado las particularidades de la región. Ahora se busca que la universidad forme profesionales que comprendan y transformen su entorno.
Otro aspecto clave de este modelo es ampliar la visión de los estudiantes y ayudarles a entender que problemas como la pobreza, el deterioro ambiental, la interculturalidad y la salud mental no son exclusivos de Chiapas, sino que forman parte de un contexto global. La intención es que los universitarios no solo analicen estas situaciones, sino que también aporten soluciones desde distintas disciplinas y con una mirada intercultural. En este sentido, la educación deja de ser solo un medio para obtener un título y se convierte en una herramienta para transformar la realidad.
Pero transformar la universidad también implica cuestionarnos qué tipo de educación estamos ofreciendo, para quién y con qué propósito. No se trata sólo de cambios en los planes de estudio, sino de una renovación profunda en la manera de pensar la educación. Por ello, es fundamental que toda la comunidad universitaria participe en este proceso: estudiantes, docentes, administrativos y hasta los empleadores. Es un proyecto que busca ser inclusivo y responder a las necesidades reales de la sociedad.
Para garantizar que esta transformación sea efectiva, la UNACH ha desarrollado un proceso metodológico en varias etapas. Primero, se establecieron grupos de trabajo con docentes e investigadores interesados en contribuir al diseño del modelo. Luego, se realizaron visitas a diversas facultades y unidades académicas en todo el estado, permitiendo que cada región aporte su perspectiva. Ahora, se está preparando un proceso de consulta más amplio, en el que se escuchará a estudiantes, padres de familia, egresados y empleadores. La doctora López Ordoñez enfatiza que es crucial conocer qué está pasando con los egresados: ¿logran insertarse en el mercado laboral?, ¿deben migrar para encontrar oportunidades? Estas preguntas ayudarán a orientar la construcción del nuevo modelo educativo.
El resultado de este esfuerzo será un modelo académico más flexible y pertinente. Se sentarán las bases para programas de estudio más accesibles y dinámicos, alineados con las necesidades del mundo laboral sin comprometer la calidad académica. Se propone la flexibilidad de los programas los cuales se podrán ver reflejados en enfoques pedagógicos innovadores, como programas modulares, aprendizaje por proyectos y educación dual. Además, se integrarán de manera transversal temas esenciales como la equidad de género, la interculturalidad, la sostenibilidad ambiental y el desarrollo tecnológico. En particular, el uso de la inteligencia artificial será un aspecto clave: más allá de comprender su funcionamiento, es necesario reflexionar sobre su impacto y el uso ético que se le dará en la educación y en la vida profesional.
Para acompañar estos cambios, los docentes recibirán formación específica en el nuevo modelo educativo. Durante el próximo verano se ofrecerán cursos que les permitirán familiarizarse con las nuevas metodologías y enfoques. Además, antes de su implementación oficial en agosto de 2025, el modelo será evaluado por diversas instancias, incluyendo el Consejo Universitario de la UNACH, la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) y la Unión de Universidades de América Latina y el Caribe (UDUAL).
Este nuevo modelo educativo representa mucho más que una reforma académica; es un compromiso con una universidad más humana, más cercana a su comunidad y a su realidad. No se trata solo de ajustar planes de estudio, sino de cambiar la manera en que concebimos la educación superior. Será un proceso largo y gradual, pero lo importante es que la UNACH ya ha dado el primer paso. Ahora, la pregunta es: ¿Estamos listos para ser parte de este cambio?
TEXTO: María del Carmen Nucamendi Estrada
En un esfuerzo por fortalecer la protección y asistencia a las personas refugiadas en México, la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH) y la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) inauguraron la Cátedra Sergio Vieira de Mello, una iniciativa que busca consolidar la vinculación entre la academia y la defensa de los derechos humanos de quienes han sido desplazados forzosamente de sus países.
La Cátedra Sergio Vieira de Mello, impulsada por ACNUR en diversas instituciones de educación superior a nivel mundial, tiene el propósito de generar espacios de formación, investigación y acción en favor de la población refugiada. La UNACH, con su ubicación estratégica en Chiapas, una de las principales puertas de entrada a México para personas en contexto de movilidad, asume un papel clave en este esfuerzo. Desde la academia, se fortalecerán estrategias para la asistencia legal, la atención médica, la integración social y el reconocimiento de los derechos fundamentales de esta población.
Chiapas ha sido históricamente un territorio de tránsito y asentamiento para migrantes y refugiados. En los últimos años, el número de personas que solicitan protección internacional en México ha crecido exponencialmente, y con ello, la necesidad de diseñar políticas públicas e iniciativas académicas que contribuyan a su integración. La UNACH ha trabajado en investigaciones, programas de apoyo comunitario y convenios interinstitucionales que abordan las dinámicas migratorias, lo que la convierte en una aliada estratégica para ACNUR.
Uno de los principales objetivos de la cátedra es la creación de clínicas jurídicas y brigadas de salud, a través de las cuales la comunidad universitaria podrá brindar asesoría legal, acompañamiento psicológico y asistencia médica a personas refugiadas y solicitantes de asilo. Estas acciones permitirán no solo apoyar directamente a quienes lo necesiten, sino también proporcionar formación práctica y sensibilización a estudiantes y docentes sobre las problemáticas que enfrenta esta población.
El evento inaugural contó con la participación de autoridades de la UNACH, ACNUR, el Congreso Local y la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), quienes destacaron la importancia de fortalecer el vínculo entre la educación superior y los esfuerzos globales en materia de protección humanitaria. La UNACH se suma así a una red internacional de universidades comprometidas con la generación de conocimiento y la promoción de políticas inclusivas en favor de las personas refugiadas.
La figura de Sergio Vieira de Mello, diplomático brasileño que dedicó su vida a la promoción de la paz y la defensa de los derechos humanos, representa el espíritu de esta cátedra. A través de esta iniciativa, la UNACH reafirma su compromiso con la construcción de una sociedad más equitativa, donde la educación y la solidaridad sean herramientas clave para transformar vidas y abrir nuevas oportunidades a quienes buscan un nuevo comienzo lejos de su país de origen.
Texto: Yadira Fontes García
Imágenes: DCS-UNACH
En la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH), el talento y la innovación son una constante, y Michelle Ayala, estudiante de la carrera de Ingeniería de Software de la generación 2024 en la Facultad de Negocios C-IV, es un claro ejemplo de ello. Originaria de Tapachula, Chiapas, Michelle ha puesto en alto el nombre de nuestra universidad al convertirse en una de las ganadoras del prestigioso Swift Student Challenge, un concurso global que reconoce a los jóvenes desarrolladores más prometedores del mundo.
“Crear apps no es sólo una cuestión técnica: es un arte en el que se entrelazan la lógica y la creatividad. Hay algo mágico en ver cómo una idea cobra vida y genera un impacto positivo en las personas”, afirma Michelle, quien ha logrado combinar su pasión por el arte y la tecnología para desarrollar aplicaciones que trascienden lo convencional. Su proyecto más reciente, Be Kind, es un juego interactivo que fomenta la empatía y motiva a los niños a realizar actos de generosidad y servicio hacia los demás.
“Los personajes de mis apps son como mi familia, cada uno tiene su propia historia y personalidad. Con la Mac y el iPad tengo las herramientas y la confianza que necesito para hacerlos realidad”, comparte Michelle, quien ha encontrado en la programación una forma de expresar su creatividad y conectar con las personas.
El camino de Michelle en el mundo del desarrollo de apps comenzó en el Swift Coding Club de la UNACH, un espacio que se ha convertido en un semillero de talentos tecnológicos. “El Swift Coding Club es un entorno motivador, lleno de personas que comparten el deseo de aprender, la pasión y el entusiasmo por la creación de apps de iOS. Con una comunidad así, la programación es aún más enriquecedora. El club se ha convertido en mi segunda casa”, destaca. Fue aquí donde Michelle descubrió que la programación era la manera perfecta de unir su amor por el arte con la tecnología, utilizando herramientas como Xcode, Freeform y Adobe Illustrator para dar vida a sus ideas.
Pero los logros de Michelle no se detienen ahí. Recientemente, representó a la UNACH en la competencia Hackathon Swift Change Makers, celebrada en Monterrey, México. Junto a sus compañeros del Swift Coding Club, desarrolló aplicaciones para solucionar problemas empresariales reales utilizando Swift en la Mac, obteniendo el premio al mejor prototipo. Este triunfo no solo refleja su talento individual, sino también el espíritu colaborativo y el alto nivel académico que promueve la UNACH.
“Ser parte de la comunidad Swift me permite ayudar y estar en contacto con gente de todo el mundo. Agradezco de corazón poder combinar mi amor por el arte y el diseño con la tecnología, salir de mi zona de confort y conocer a otras personas. Vivo entusiasmada por todo lo que está por venir”, expresa Michelle, quien se ha convertido en un referente para la comunidad estudiantil de la UNACH.
Michelle Ayala es más que una estudiante destacada; es un símbolo de cómo la UNACH forma profesionales capaces de destacar en escenarios nacionales e internacionales, utilizando la tecnología como una herramienta para generar un impacto positivo en la sociedad. Su historia inspira a las nuevas generaciones a perseguir sus sueños y a creer en el poder de la innovación.
Michelle Ayala está marcando tendencia en la UNACH y en el mundo
texto: Claudia I. González Farrera
imagenes: Portal College students de Apple
https://www.apple.com/mx/education/college-students/success-stories/ayala/